Desde la cancelación de Teen Titans (2003-2006) hace más de 10 años, sus seguidores no han desistido en la esperanza de conseguir una sexta temporada. En 2013, el anuncio de Teen Titans Go! hizo creer que los fans estaban siendo escuchados, y el resultado lo conocemos.

La ola de críticas que recibió la caricatura sin duda amenazó su permanencia en televisión, pero de una inteligente manera lograron ganarse una buena cantidad de seguidores, ¿cómo lo habrían logrado? con la burla. Burla a DC cómics, Cartoon Network y, por sobre todo, a ellos mismos y a sus espectadores.

Teen Titans Go! nunca fue lo que lo que el público pidió, pero una vez que comenzaron a hacer humor de aquello, el odio generalizado (y hoy también opino que injustificado) cesó. Teen Titans Go! Vs. Teen Titans es todo esto llevado a un nuevo y más explícito extremo, y éste es quizá su punto más fuerte.

Seamos honestos, el regreso de los Jóvenes Titanes originales, si bien fue un buen enganche para todos los seguidores de estos personajes, no es ni de cerca el atributo más trabajado de la película. Sus diseños intentan acercarse a los originales, pero ni estos ni sus personalidades encajan en totalidad, e incluso no se sienten ellos mismos. La película en sí tiene una trama floja e irónica, y de ninguna forma lo digo de manera despectiva, porque la película claramente no buscaba ser ni intensa ni profunda ni seria; por eso mismo, y a pesar de eso mismo, no se convierte en una pésima película. De nuevo, la parodia es el elemento esencial de todo.

Dicho de otra forma, Teen Titans Go! Vs. Teen Titans no es más que una gran parodia y  comedia de poco más de una hora. Parodia a los fans, a los personajes, a las películas de superhéroes y a su propia producción (un número musical completo justificado en que falta más tiempo en pantalla habla por sí mismo). Todo aquello junto la vuelve genuinamente disfrutable.

En este aspecto, incluso el hecho de que los Teen Titans originales (o "serios", como los llaman en la cinta) se alejen un poco a sus versiones de 2003 es comprensible, dado que se entiende que son más bien parodias de ellos, que ellos en sí;  allí el porqué exagerar sus características y diálogos.

Ahora, debo dejar en claro que de ninguna manera es la mejor película de animación desarrollada por DC cómics, y le queda muy por detrás a su antecesora, Teen Titans Go!: to the movies, no obstante recordemos que aquella fue producida para cine, y ésta para distribuir directo a DVD, y si bien muchas de las mejores películas de DC han sido directo a video, tenemos que entender que el equipo detrás de ésta caricatura no busca (y no buscarán jamás) hacer historias de ese calibre.

Y entonces, ¿Qué buscan? Ser ligeros, burlarse de todo, y al mismo tiempo ser apta para todo públicos (entiéndose tanto fans que siguen a los personajes desde 2003, como a los niños en los que intenta enfocarse la de 2013, e incluso espectadores que no tengan conocimiento previo). Este película logra todo eso efectivamente. De hecho, podría considerarse un muy buen vínculo entre las generaciones que crecieron o con la caricatura original o con el reboot de 2013.

En fin, insisto en decir que Teen Titans Go! Vs. Teen Titans es una película genuinamente graciosa, que en definitiva todos los seguidores de esta franquicia deberían ver y disfrutar sin tomársela tan en serio, y entendiendo que no se trata de un homenaje ni de un regreso, sino, como ya lo dije, de una parodia, que exagera lo mejor y lo peor de todos estos personajes.